La fibra de pindo, recolectada y tejida a mano en el municipio de Palermo, Huila, le otorga ligereza, frescura y una textura suave al tacto. El trenzado fino y el detalle decorativo en la base de la copa resaltan la destreza artesanal de su elaboración.
Perfecto para protegerse del sol con estilo, ya sea en un paseo rural, en la ciudad o como parte de un outfit elegante y natural. Un sombrero que representa el equilibrio entre tradición, diseño y sostenibilidad.